Pensemos que ya te decidiste por hacer un cambio en el diseño de tu casa. Ese es el primer paso y el más difícil de tomar. Sin embargo, el problema viene de qué estilo de diseño elegir.
Mucha gente ya tiene una idea de cómo quieren decorar su habitación. Puede ser un mueble existente o un artefacto, una obra de arte o una imagen en una revista.
Si ya tienes una idea del estilo que deseas seguir, ya sea náutico, provincial francés, victoriano, asiático, entonces puedes comenzar a buscar ideas sobre ese aspecto, tema o estilo. Usando ejemplos de libros, revistas, sitios web, películas, programas de televisión, puedes comenzar a recopilar y formar ideas sobre cómo se logra ese estilo. Y a partir de ahí puedes comenzar a planear.
1. Hacer un plan y comenzar a trabajar
Hacer un plan de acción es vital para comenzar un proceso de decoración de interiores. Esta será una parte importante para lograr resultados óptimos. Concéntrate en ese plan y decide si encajará en el espacio en el que estás trabajando y si realmente incorporan tu gusto.
Muchos estudios profesionales de diseño de interiores recomiendan invertir un tiempo considerable en la planeación de todo el proyecto para obtener mejores resultados.
A veces, los espacios de la habitación con los que tenemos que trabajar no serán capaces de lograr el nuevo aspecto que deseas.
Como con todo en la vida, debe ser práctico y trabajar dentro de sus parámetros, a menos que pueda realizar cambios estructurales importantes.
Por ejemplo, si deseas una apariencia minimalista y modernista con grandes ventanales y tienes una casa española con arcos macizos de yeso que se canalizan a través de la sala no podrá lograr esta apariencia sin demoler todo el casa y empezar de nuevo.
Nosotros desaconsejamos el uso de temas o períodos completamente diferentes para diferentes habitaciones en la misma casa. Esto puede hacer que su hogar esté muy inconexo y molesto a la vista, puede usar diferentes muebles o artefactos de diferentes períodos o temas en habitaciones individuales, y esto ayuda a crear su estilo individual dentro de su tema, pero en general es mejor mantener un tema común en su hogar, no cree un escenario de película con cambios dramáticos de una habitación a otra.
2. Comenzar con el trabajo de decoración
Ahora que estamos pensando en nuestro tema o estilo, necesitamos averiguar cómo incorporar esa apariencia en nuestra habitación.
Utilizar los colores decorativos de un período o época de la que derivan sus muebles es una forma sencilla de decorar para realzar los muebles y crear su estilo en la habitación utilizando pinturas, papeles pintados, alfombras y telas.
3. Es hora de pensar en los accesorios
Los accesorios son parte fundamental del diseño. Si bien las paredes y muebles son quienes aportan un impacto fuerte en el diseño, los accesorios son fundamentales para hacer que todo fluya.
Si disfrutas del coleccionismo de figurines como teteras o platos de porcelana, muñecas de porcelana o cucharillas de plata, puedes usarlos para crear tu propio estilo individual. Simplemente encuentra una cómoda, una vitrina, una librería o una pared adecuada para exhibir su colección de tesoros.
Lo importante en lo que hay que pensar aquí es en agrupar, no los distribuya por toda la habitación, manténgalos todos juntos donde se puedan apreciar todos a la vez, de esta manera, crea un punto focal y no una distracción de desorden si todos estuvieran colocados al azar. A continuación, puede elegir un color predominante de su colección para basar su decoración.
Entendiendo el diseño y su impacto en el hogar
Lo divertido del diseño es contar una historia y al combinar diferentes períodos en una habitación creas un viaje mientras tu ojo salta de uno a otro preguntándose cómo apareció esta pieza aquí. Este estilo se llama ecléctico, y es básicamente lo que la mayoría de nosotros seguimos, seleccionamos artículos que nos gustan y los juntamos todos y creamos nuestro propio estilo o apariencia que representa nuestro estilo de vida.
